No hay nada más en esta vida que pueda transformar verdaderamente a una persona como lo es el gozo.
¿Qué significa esta declaración? Significa que cuando una persona experimenta el gozo en su vida las dificultades pierden el dominio y el control sobre ella. La enfermedad, la pobreza, el dolor, o la aflicción ya no tienen dominio ni poder sobre quien está lleno de gozo.
La Biblia declara: "El gozo del Señor es nuestra fortaleza" (Nehemías 8:10) Es algo que está en lo profundo del ser; elgozotiene que ver con el espíritu. Debemos de entender la diferencia que existe entre felicidad y gozo. La felicidad depende de las cosas que tenemos o poseemos, tales como propiedades, dinero o seres amados. El gozo viene de Dios y se deposita en lo profundo del ser.
JESÚS dijo: "El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior, correrán ríos de agua viva" (Juan 7:38).Es el gozo sin barreras que sale del interior de la persona con una espontaneidad tan alegre que atrae y cautiva instantáneamente. La clave para tener esta clase de gozo en nuestra vida es creer en JESÚS.
El escritor sagrado dice:" El corazón alegre constituye buen remedio, mas el espíritu triste seca los huesos" (Proverbios 17:22). JESÚS es quien llena nuestro corazón de ese gozo que brota de nuestro interior como una gran fuente y que contagia a quienes nos rodean. Es importante que en estos tiempos podamos hacer un alto en nuestra vida y considerar que es necesario estar llenos de gozo, que las circunstancias no son las que deben gobernar nuestras acciones ni nuestras respuestas a las situaciones que vivimos.
Se ha comprobado científicamente que una persona que ríe, al hacerlo le da masaje a su corazón y así prolonga la vidas útil del mismo. Al contrario, si se preocupa demasiado, si se llena de amargura, su espíritu se entristece y las enfermedades llegan y se quedan en nuestro cuerpo con mayor facilidad. Por eso debemos alinearnos con la Palabra: "El gozo del Señor es nuestra fortaleza".
OREMOS: Padre, te pido que el gozo que solo proviene de ti, llene mi vida y mi corazón. Que dependa de ti en todo, por todo y para todo. Porque al hacerlo Tu gozo llenará mi espíritu. Gracias en el nombre de JESÚS. Amén.